Hollywood alucinaba en los 50 (Lucy in the Sky with Diamonds)

Fuente: Vanity Fair.

La versión norteamericana de Vanity Fair recoge el testimonio de una de las personas que allá por los 50 experimento con ácido lisérgico (LSD).


Literalmente en los 50 y 60 prestigiosos actores experimentaron con LSD, en aquellos años legal y poco conocida. Gary Grant fue el primero en hablar públicamente de ello. El primer número de Septiembre de la Revista Look, rezaba en su portada: El nuevo Gary Grant y su curiosa historia, en una ámplia entrevista el actor hablaba de sus virtudes: “Gracias a la terapia con LSD, ahora estoy acercándome a la felicidad”

Una apacible mañana de Abril de 1962, Cary tragó cuatro pequeñas píldoras azules de ácido lisérgico, se relajó en el sofá con un café y esperó a que la droga hiciese efecto. No era su primera sesión. Tenía 58 años y este era su viaje nº 72, la novedad residía en que en esta ocasión sus alucinaciones quedaron registradas en una grabadora bajo la supervisión de un psiquiatra para un análisis médico posterior.

Oscar Janiger fue el psiquiatra que le administraba la droga siendo uno de sus principales investigadores, él mismo Janiger relata: “aquella era una época en que la experimentación científica con drogas psicodélicas era perfectamente aceptable”. La probó en 900 pacientes, durante el que vendría a ser el más amplio experimento con LSD sobre humanos realizado en un medio no clínico.

El contexto de la época no da cierta explicación, las apariencias se cuidaban por encima de todo; los traumas personales no debían expresarse nunca; todos fumaban y bebían pero la cocaína aún no estaba socialmente extendida. En este entorno se movía Gary Grant cuando estaba casado con Betsy Drake y fue ella quien le introdujo en el consumo de LSD.

Aunque parecían una pareja perfecta, ella se sentía frustrada y acabó de hundirla la sospecha de que su marido se había enamorado de Sofía Loren. Entonces comenzó a tratarse con ácido.

Mortimer Hartman, psicoterapeuta de Sally, era radiólogo de profesión empezó a experimentar con LSD a mediados de los 50 y tanto fue su entusiasmo que abandono la radiología y se asoció con el psiquiatra Arthur Chandler para crear el denominado Instituto Psiquiátrico de Beverly Hills, se aseguraron el suministro directo de la droga por parte del laboratorio fabricante , Sandoz, para lo que describían como un estudio de 5 años de duración en el que el LSD sería empleado en el tratamiento de los neuróticos normales.

Cobraban 100 dolares por sesión y su consulta estaba llena. Betsy recuerda su primera sesión: “sentí una sensación horrible, como sí me estuvieran aplastando el cuerpo” y presa de intensos dolores físicos, se dio cuenta de que estaba reviviendo su propio nacimiento. Tras su divorcio de Grant, Betsy se licenció en Psicología por Harvard y está especializada en la terapia de psicodrama.

Gary Grant aseguraba que el LSD lo ayudó a controlar su alcoholismo y a enfrentarse a ciertos problemas personales y familiares. “Cuando comencé a experimentar, la droga parecía liberar mis miedos más profundos, como un sueño que se transforma en una pesadilla, tuve experiencias horribles pero con cada sesión todo fue mejorando” No contó que en las primeras sesiones perdía el control de sus esfínteres.
Al ller el artículo en Look, Esther Williams llamó a a Grant y quiso a través del LSD superar un divorcio que había sido traumático y la había dejado arruinada. Relata: “Noté que las tensiones se disipaban mientras el alucinógeno barría en mi interior, Y entonces me trasladé hasta el lugar preciso de mi psique de donde procedía toda mi angustia” Esther había revivido el día en que, cuando tenía 8 años, murió su hermano mayor, que entonces tenía 16 años.

El boca a boca hizo el resto. James Coburn relataba de su primer viaje: “Fue fenomenal y me encantó, permitió que viera el mundo con cierta profunda objetividad”

Otro de sus pioneros fue un joven de 25 años llamado Jack Nicholson que luego incorporó su viaje a su guión para The Trip, un film sobre una intensa sesión con LSD, protagonizado por Peter Fonda y Dennis Hopper.

También probaron en aquella época el director Sidney Lumet y el escritor Aldous Huxley.

En 1962, el organismo regulador estadounidense empezó a confiscar sus reservas de LSD: el Instituto Psiquiatrico de Beverly Hills cerró sus puertas ese mismo año. La proliferación de LSD en las calles y sus trágicas consecuencias hicieron saltar la alarme y la droga fue declarada ilegal en 1968, Gary Grant dejó de hablar de LSd y al parecer de consumirlo pero en su testamento le dejó diez mil dólares al doctor Hartman, quien le había iniciado en el ácido lisérgico.

LUCY IN THE SKY  WITH DIAMONDS.

IMAGÍNATE EN UNA BARCA EN UN RÍO CON MANDARINOS Y CIELOS DE MERMELADA.


ALGUIEN TE LLAMA, RESPONDES DESPACIO, UNA CHICA CON OJOS DE CALEIDOSCOPIO.
FLORES DE CELOFÁN AMARILLO Y VERDE, AMONTONÁNDOSE SOBRE TU CABEZA.


BUSCAS A LA CHICA CON EL SOL EN LOS OJOS Y SE HA IDO.
LUCY EN EL CIELO CON DIAMANTES LUCY EN EL CIELO CON DIAMANTES LUCY EN EL CIELO CON DIAMANTES AH, AH
LA SIGUES HASTA UN PUENTE JUNTO A UNA FUENTE, DONDE GENTE CON CABALLOS DE MADERA


COMEN TARTAS DE MALVAVISCO, TODOS TE SONRÍEN MIENTRAS LA DERIVA TE LLEVA


A TRAVÉS DE LAS FLORES QUE CRECEN INCREÍBLEMENTE ALTAS.


TAXIS DE PAPEL DE PERIÓDICO APARECEN EN LA ORILLA,


ESPERANDO RECOGERTE.


TE SUBES DETRÁS CON TU CABEZA EN LAS NUBES


Y TE HAS IDO.
LUCY EN EL CIELO CON DIAMANTES LUCY EN EL CIELO CON DIAMANTES LUCY EN EL CIELO CON DIAMANTES AH, AH
IMAGÍNATE EN UN TREN EN UNA ESTACIÓN


CON PORTEROS DE PLASTILINA QUE LLEVAN CORBATAS QUE PARECEN DE CRISTAL.


DE REPENTE HAY ALGUIEN ALLÍ EN EL TORNO,


LA CHICA CON LOS OJOS DE CALEIDOSCOPIO.
LUCY EN EL CIELO CON DIAMANTES LUCY EN EL CIELO CON DIAMANTES LUCY EN EL CIELO CON DIAMANTES